El Consejo Nacional de Universidades (CNU) aprobó en sesión extraordinaria la Normativa Nacional de los Sistemas Multimodales de Educación Universitaria y Educación mediada por las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), el pasado 17 de agosto.
Es un reglamento con 40 artículos que se enfoca en buscar fijar parámetros sobre la educación a distancia, modalidad a la que Venezuela tuvo que migrar de manera abrupta e improvisaba con la llegada de la pandemia del COVID-19 en marzo de 2020.
La rectora de la Universidad de Oriente (UDO), Milena Bravo, explicó a Efecto Cocuyo que hubo alrededor de 12 artículos sobre los que no se pudo llegar a un consenso absoluto. Para los rectores de Averu, parte de la normativa atenta contra la autonomía universitaria.
“Esperábamos conciliar, pero no aceptaron nuestras sugerencias”, dijo la máxima autoridad de la UDO sobre la sesión del pasado martes en el CNU.
Las objeciones de la Averu
Los desacuerdos comienzan por el principio. El artículo 1 reza que el objetivo de ese articulado es “normar la organización, estructura y gestión” de estos sistemas multimodales, que comprenden o pueden combinar experiencias de: educación a distancia, presencial, semi presencial y mediada por las TIC en línea o virtual.
Bravo opinó que, con ese objetivo de “normar”, el artículo choca contra lo establecido en la Ley de Universidades y el artículo 109 de la Constitución, que indica que “las universidades autónomas se darán sus normas de gobierno” en cuanto a lo administrativo y lo académico.
Otra objeción de la Averu es al artículo 8. Este señala que no se podrá dar inicio a ningún programa de formación, conducente a grado y enmarcado en los sistemas multimodales, sin la aprobación del CNU y del Ejecutivo nacional.
El artículo 35 de la normativa agrega que las instituciones de educación superior que aplican matrículas para sus programas de formación mediados por las TIC deberán pagar al CNU cada año un arancel equivalente a 10 % de los ingresos percibidos por matrícula en cada institución responsable de dichos programas. “Eso molestó muchísimo en Averu”, dijo la rectora de la UDO.
Conexión y equipos
Un estudio del Observatorio de Universidades sobre condiciones de vida de la población universitaria, en el que realizaron 4.180 encuestas, arrojó que para el 83 % de los profesores y estudiantes su conexión a Internet es de regular a mala.
También arrojó que la mitad de los entrevistados no contaban con una computadora portátil y la mayoría no contaba con una computadora de escritorio de uso individual. Alrededor de un 30 % no contaba con un teléfono inteligente propio.
Milena Bravo recordó que las universidades autónomas terminaron el semestre “con mucho sacrifico” y recuerda que, debido a lo abrupto de la migración a la educación a distancia, “tuvimos que ir improvisando, nadie estaba preparado”.
El artículo 30 de la nueva normativa aprobada por el CNU establece que las universidades que pretendan administrar programas de formación mediados por las Tecnologías de la Información y la Comunicación, “deben contar con la infraestructura tecnológica requerida, la planta física adecuada y el personal técnico idóneo que garanticen el desarrollo y funcionamiento de los medios tecnológicos”.
La rectora de la UDO se preguntó cómo será viable ofrecer a los estudiantes plataformas adecuadas, buena conectividad e infraestructura si el Estado ni siquiera ha saldado su deuda del presupuesto ley de las universidades desde el 2020.
“No nos envían presupuesto ni para servicios básicos… están pensando en llamar a clases (presenciales) en octubre y la situación de la infraestructura es grave. Hablo por la UDO, yo tengo dos núcleos que si llaman a clases no tengo pupitres dónde sentar a los estudiantes, menos puedo yo aplicar una normativa que a todas luces todavía tiene muchos desencuentros con las universidades”, dijo.
Revise la normativa aquí
Normativa Multimodal de Los… by Efecto Cocuyo
Fuente: María Victoria Fermín Kancev | @vickyfermin | Efecto Cocuyo